Monilia del almendro

En este artículo queremos abarcar una de las enfermedades del almendro más agresivas que existen en los cultivos españoles de almendros. Nos referimos a la moniliosis o monilia del almendro. Y es que cuando esta aparece puede comprometer gravemente el rendimiento de los árboles y la cosecha. Es conocida también como podredumbre parda ya que tiene como efecto principal la desecación del órgano afectado.

Para que se entienda lo importante que es esta enfermedad en nuestro país, podemos tomar como referencia los datos que posicionan a ​la monilia como la principal causa de las pérdidas en la cosecha de los almendros españoles del 2020​. Y es que se trata de una enfermedad que en las zonas de cultivo de nuestro país, encuentra las condiciones climáticas perfectas.

Por ejemplo durante la primavera del 2020 se dio una temperatura muy cálida desde el inicio y una presencia de lluvias prolongada. Eso creó el contexto perfecto para la aparición del hongo responsable de la moniliosis en los almendros.

Características principales de la enfermedad monilia en almendros

Antes de esporular estos hongos del almendro suelen hibernar en forma de micelio en heridas o chancros de los brotes, tallos y frutos momificados que han sido infectados previamente. Así mismo también se mantienen latentes en restos orgánicos que serán la primera fuente de inóculo hasta que llegue la humedad.

Estos hongos producen las esporas durante el invierno o primavera. Concretamente cuando existan niveles elevados de humedad, se activan y empiezan a producir las conidias, para después infectar a nuevas flores, brotes y yemas gracias al transporte de las lluvias, vientos o neblinas.

En España, de forma generalizada, se dan las condiciones climáticas propicias para la aparición de esta enfermedad. Especialmente vemos una afección más elevada en las zonas de interior que concentran temperaturas frías, así como las del litoral que tienen presencia de temperaturas cálidas. Ambas zonas combinan esas temperaturas con altos niveles de humedad que darán la combinación perfecta para la aparición de la monilia en almendros.

Como hemos comentado el nuevo ciclo de infección lo hace desde las yemas, brotes y flores, desde donde penetran y bloquean el paso de la savia que hará que el resto de órganos empiecen a secarse lentamente.

Principales síntomas para detectar la enfermedad de monilia en los almendros

El principal síntoma de la monilia en los almendros es el desecamiento de las flores ya que el ataque se hace a través de este órgano. A partir de ahí el hongo avanza con la infección y bloquea la savia que desecará el resto de órganos. Por lo tanto, a medida que la enfermedad avanza las ramas y los frutos también sufrirán las mismas consecuencias.

El proceso de infección empieza desecando y acaba momificando tanto las flores, como las hojas y los frutos, los cuales quedarán adheridos a la rama. Antes de llegar hasta este punto aparecen chancros con goma que es el síntoma que nos advertirá que la savia interna está siendo bloqueada.

Medidas preventivas y acciones culturales para afrontar la moniliosis en almendros

Una de las primeras acciones que deberíamos llevar a cabo, es la eliminación de órganos afectados. Solo así evitaremos la propagación de la misma por el resto del almendro o hacia otros almendros sanos. Mediante la poda se deben eliminar los brotes y ramas que presenten síntomas. Teniendo en cuenta que luego estos restos orgánicos se deben eliminar por completo y alejar del cultivo. Así mismo se deben limpiar de forma adecuada las herramientas de poda para evitar un contacto contagioso hacia el resto de la plantación.

Como siempre existen varias acciones preventivas que nos ayudarán a minimizar la presencia de enfermedades como la moniliosis en almendros:

  • HISTORIAL DE PARCELA: una buena forma de prevenir enfermedades es conocer el estado del suelo y el historial de la parcela. Saber, por ejemplo, si ha sufrido enfermedades en años anteriores o el tipo de variedades susceptibles que hay plantadas. Estos datos pueden darnos pistas de por dónde actuar.

  • FUNGICIDA Y FITOSANITARIOS: el uso de productos químicos y fitosanitarios nos puede servir especialmente en los momentos de alta sensibilidad del almendro que son: antes de la floración, justo al florecer y después de la caída de los pétalos. Existen tratamientos químicos más recomendados que otros, por ejemplo, para aplicarlo antes de la floración podemos utilizar cualquiera que tenga Oxicloruro de Cobre. Por otro lado, justo en la floración debemos aplicar Folpet o Maccozeb de manera que se reduzcan las posibilidades de infección en las flores. Y finalmente cuando se caigan los pétalos se puede aplicar Captan o Tiram.

  • RIEGO: el sistema de riego puede ser crucial a la hora de prevenir esta enfermedad. Como ya hemos mencionado, el exceso de humedad hace que la monilia propague su infección. Así pues evitaremos encharcamientos y permitiremos la aireación del suelo.

  • PODA: el sistema de poda utilizado de forma preventiva consistirá en la formación de la copa del árbol de manera que se propicie la aireación y se evite la acumulación de zonas humectantes que puedan dañar el tejido vegetal.

Somos expertos en atacar y prevenir la enfermedad de la monilia

Desde ​Isaticar Agro queremos prevenirte sobre esta enfermedad que está especialmente presente en los cultivos españoles y puede causar consecuencias económicas muy duras para el agricultor.​ Por eso, si crees que tu cultivo puede tener esta, o cualquier otra enfermedad, no lo pienses, es muy importante actuar a tiempo y que la enfermedad no pase a mayores.

Ponte en contacto con nosotros y nuestros expertos te responderán​. Estudiaremos tu caso para poder aconsejarte sobre las mejores prácticas y los mejores productos fitosanitarios para tu cultivo de almendros. Solo así nos aseguraremos que tu cosecha no sufra pérdidas. 

Otras enfermedades del almendro

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